Le asesoramos y le representamos penalmente en todo tipo de casos como delitos contra las personas, delitos de tráfico de drogas, seguridad vial, alcoholemia, robos, delitos contra el honor, asistencia ante Tribunales, delitos contra el Patrimonio, delitos contra la libertad sexual, etc.
El procedimiento penal de España se divide en fases, y cada fase tiene su función y su relevancia: la fase de de instrucción o investigación, la fase intermedia, Fase de juicio oral y sentencia
Las dos primeras fases se consideran fases digamos preparatorias, y la última es en la que realmente se practica la prueba.
Dependiendo del procedimiento, (juicios rápidos, diligencias previas, juicio sumario etc.) el procedimiento y sus fases tendrán una serie de particularidades que será vital conocerlas al detalle.
Es imprescindible tener en cuenta que todo lo que ocurre desde el inicio del procedimiento es relevante por la propia esencia del procedimiento penal, por lo que somos esclavos de lo que decimos y de lo que callamos, y cualquier paso en falso puede tener unas consecuencias irremediables.
Por ello se hace, en el proceso penal se hace necesario contar desde el principio con una estrategia realista frente al procedimiento en función todas las circunstancias que rodean al mismo y que puedan usarse.
Es muy importante que exista buena comunicación entre el cliente y el abogado que se haga cargo del procedimiento. El cliente debería contarle todo lo relacionado con el asunto para que el abogado encargado de la defensa tenga toda la información necesaria para poder plantear así una estrategia adecuada a los fines pretendidos. Engañar al abogado es la mejor manera de obtener el peor resultado.
Concedemos gran importancia a ser realista y responsable con las circunstancias, evitando generar falsas esperanzas o expectativas y haciendo un minucioso análisis de la situación.